"Este es el verdadero desarrollo de la personalidad, con escenarios deportivos con, escuelas de formación. Estas obras son las que más me llenan de alegría de satisfacción, ver a los padres de familia con sus hijos, a las familias reunidas en torno al deporte. Y son estas obras las que me reafirman que vale la pena haber ocupado un cargo público, demostrando con hechos que lo público debe y tiene que ser mejor que lo privado", manifestó el gobernador de Santander.

Este, se había convertido en el sueño más anhelado por los patinadores cimitarreños, quienes clamaban un escenario idóneo para entrenar, ya que durante muchos años tuvieron que hacerlo en una pequeña cancha de cemento.

Frente a esta sentida necesidad, el 25 de agosto de 2017, el gobernador Didier Tavera se comprometió a ejecutar esta obra deportiva, concibiéndola como herramienta fundamental para la formación integral de los niños y jóvenes. Hoy, cumpliendo con el valor de su palabra empeñada, materializó este sueño y demostró, una vez más, que sí es posible ejecutar obras de calidad con eficiencia y transparencia.

"Quiero darle un gran agradecimiento al gobernador por habernos dado esta obra tan maravillosa, que nos permite poder patinar con más dedicación, con más esfuerzo. Darle muchas gracias porque nos cumplió el sueño de tener una pista donde poder patinar", exaltó el patinador Sebastián Villalba.