Con obras de mitigación, Santander es un territorio menos vulnerable
El director de Gestión del Riesgo de Desastres de Santander, Ramón Ramírez Uribe, dijo que gracias a los avances en prevención y obras reducción del riesgo de desastres realizadas por el Gobierno Departamental, la fuerte tormenta eléctrica, acompañada de lluvia, vendaval y granizada, que se presentó ayer en Bucaramanga, área metropolitana y otros municipios de Santander, no dejó grandes afectaciones en la comunidad.
Según el funcionario, el fenómeno climático dejó una persona lesionada en Girón, suspensión del servicio eléctrico en varios sectores, algunas casas destechadas, árboles caídos, crecientes súbitas en el río Frío de Girón y en la quebrada Perchiquez de Cepitá y granizada en Zapatoca, entre otros daños, pero no las tradicionales tragedias que ocurrían en el departamento.
Ramírez Uribe informó que la tormenta eléctrica generó afectaciones en Lebrija, Girón, Floridablanca, Bucaramanga, Zapatoca, Cepitá, Mogotes y otros sectores del departamento.
“Fueron alrededor de 10 municipios afectados por el fenómeno climático. A fecha, son 32 en calamidad pública, y en varios de estos se tienen problemas en infraestructura de techos. Estamos arreglando cerca de 30 instituciones educativas y entregando nueva infraestructura de servicios de luz”, dijo el Director de Gestión del Riesgo.
También afirmó que la tormenta de ayer puso a prueba las obras de mitigación que el Gobierno de Didier Tavera construyó en el río Frío y en la quebrada la Perchiquez, donde se presentó una creciente histórica, que no generó afectaciones.
De igual manera, indicó que según pronósticos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) estas condiciones climáticas van a continuar, “porque estamos en la temporada de los vientos de agosto (vientos alisios) y de los huracanes en el mar Caribe, que generan tormentas eléctricas al interior del país, como el departamento de Santander”.
También dijo que ya se aproxima la segunda temporada de lluvias de este año, que iniciará en septiembre, por lo que los santandereanos deben tomar acciones respectivas para evitar graves afectaciones.
“Reforzar techos, amarrar bien las tejas, cambiar las que estén dañadas, limpiar los canales de las viviendas, alcantarillas, quebradas y demás sistemas de evacuación de agua, podar árboles, retirar escombros y basuras de las vías, son algunas de las recomendaciones que hacemos desde la Gobernación a la ciudadanía, para así evitar colapsos por las lluvias”, indicó Ramón Ramírez Uribe.
Audio: Ramón Ramírez Uribe, director de Gestión del Riesgo de Desastres de Santander